12/12/2024
Ya sea por las presiones diarias, como los plazos laborales, o por eventos que cambian la vida, como la pérdida de un ser querido, todos nos enfrentamos al estrés en algún momento de nuestras vidas. Si a esto le sumamos el frenesí de fin de año con los preparativos navideños, la compra de regalos y los compromisos sociales, el nivel de estrés puede ser enorme. Aunque el estrés pueda parecer una parte más de la vida, los expertos advierten que su impacto en el cuerpo es grave y duradero.
“[El estrés] puede provenir de nuestro interior —como una enfermedad o dolencia— o del entorno”, afirma el Dr. Ernesto Schiffrin, médico jefe del Hospital General Judío. “Cuando el cuerpo se siente atacado, activa la reacción de 'lucha o huida', liberando adrenalina y aumentando los niveles de cortisol”.
Según Schiffrin, el impacto del estrés en el cuerpo puede ser agudo o crónico, lo que significa que puede presentarse de forma repentina o leve con el tiempo. "Con el tiempo, puede contribuir a un aumento de la presión sangre , enfermedad coronaria, infartos y, finalmente, insuficiencia cardíaca".
Schiffrin describe el estrés como una "agresión contra el cuerpo". Si no se controla, puede incluso causar problemas cardíacos repentinos, como el síndrome del corazón roto , una afección que imita un infarto y que suele desencadenarse por un trauma emocional.
Los estresores cotidianos también pueden acumularse. Según un estudio de 2018 , los sentimientos negativos persistentes derivados de pequeñas frustraciones se han vinculado con enfermedades crónicas en etapas posteriores de la vida. "Después de que cesa un factor estresante agudo , los niveles suelen volver a la normalidad", explicó la Dra. Sherita Hill Golden, profesora de medicina y epidemiología de la Universidad Johns Hopkins. Sin embargo, si esos niveles se mantienen elevados, el cuerpo puede desarrollar resistencia a la insulina, lo que aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas y diabetes. "La resistencia a la insulina también puede hacer que el cuerpo sea más propenso a la inflamación y provocar daño sangre ", añadió.
A medida que el año llega a su fin, aumentan los estresores únicos. La temporada navideña, en particular, trae consigo alegría y presión. Las reuniones familiares, las preocupaciones financieras y la interrupción de las rutinas pueden pasar factura. Un estudio de 2019 reveló que las personas con trastornos relacionados con el estrés tenían un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular durante 27 años de seguimiento, lo que subraya la necesidad de una gestión proactiva del estrés, especialmente durante épocas de mucha actividad como las fiestas.
¿La buena noticia? Hay maneras de combatir el estrés y proteger la salud, incluso durante las temporadas más agitadas:
Con la enfoque de las fiestas, regálese la paz. Al gestionar el estrés eficazmente, podrá disfrutar de las alegrías de la temporada sin sacrificar su salud.
O, como dice el Dr. Shiffrin: “Tómate tiempo para las cosas que te traen felicidad”.