Ya sea que esté lidiando con el estrés, recuperándose de una lesión o enfrentando una enfermedad o condición de salud, es posible que desee incluir la terapia de Reiki como parte de su proceso de curación natural.
La palabra Reiki (pronunciada ray-key) proviene del japonés y significa “energía vital universal”. Es una forma de tratar la mente, el cuerpo y el espíritu de manera holística. “El Reiki cura equilibrando los centros de energía del cuerpo y eliminando bloqueos. Como resultado, la energía se dirige a los espacios físicos, emocionales, mentales y espirituales donde se necesita. El Reiki trabaja para curar la causa en lugar de los síntomas de cualquier enfermedad”, explicó Patti Oskvarek, practicante de Reiki y voluntaria en el Banner Baywood Medical Center en Mesa, Arizona.
Los tratamientos de Reiki se pueden realizar en cualquier lugar, pero la mayoría de las personas prefieren una habitación tranquila y silenciosa. Durante el tratamiento, te recuestas o te sientas en una silla, completamente vestido. Un practicante coloca suavemente sus manos sobre tu cuerpo o justo por encima de él en varios lugares de tu cabeza, torso, brazos y piernas para ayudarte a sentirte tranquilo y relajado.
Oskvarek dijo: “Muchas personas sienten una diferencia después de una sola sesión, mental, emocional, espiritual y/o física. Por lo general, lo primero que dice una persona después de un tratamiento es “¡Guau!”. Y aunque algunas personas vienen como escépticas, después de una sesión, por lo general se convierten en creyentes y defensores del Reiki”.
Una sesión de Reiki puede durar entre 20 y 90 minutos, aunque lo habitual es que dure 60 minutos. Según tu estado de salud, es posible que quieras programar sesiones semanales, quincenales o mensuales. “Si tienes una enfermedad grave, deberías programar tus sesiones con bastante frecuencia”, afirma Oskvarek. “El Reiki es seguro, suave y no daña. El Reiki siempre actúa en beneficio del bien mayor, por lo que no tiene efectos secundarios”. Sin embargo, las sesiones normalmente no están cubiertas por el seguro.
¿Qué tipos de condiciones puede tratar el Reiki?
“No importa qué problemas de salud tengas, el Reiki puede ayudarte”, afirmó Oskvarek. Los beneficios del Reiki para la salud pueden brindarte consuelo si estás sufriendo un hematoma leve, padeces cáncer o te estás recuperando de una cirugía.
El Reiki ayuda a relajarse profundamente y la relajación puede ayudar a reducir la tensión y el dolor muscular, liberar el estrés, acelerar la curación de heridas y mejorar la salud y el bienestar. “El Reiki apoya y acelera la capacidad natural del cuerpo para curarse a sí mismo, aliviando el dolor, eliminando toxinas y equilibrando todo el campo energético”, afirmó Oskvarek.
La gente lo usa para tratar:
- Estrés y ansiedad
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
- Depresión
- Dificultad para dormir
- Estado de ánimo bajo
- Dolor
- Sangre
- Fibromialgia
- Recuperación quirúrgica
- Síntomas del cáncer
El Reiki también puede animarte a examinar tus respuestas emocionales y dejar ir las emociones negativas como la ira y el resentimiento.
Puede utilizar Reiki junto con tratamientos médicos convencionales, otras terapias holísticas o médicas, terapias de salud alternativas, complementarias e integrativas.
¿Cómo puedo encontrar un practicante de Reiki?
Puede buscar un practicante de Reiki en su área en línea a través de sitios como Thumbtack . Oskvarek recomienda elegir un maestro o practicante de Reiki que esté acreditado en Reiki II o superior y pedir testimonios de los clientes.
También puedes conectarte con asociaciones de Reiki como:
- Organización Internacional de Reiki
- Centro Internacional de Formación en Reiki
- Asociación Internacional de Profesionales del Reiki
El resultado final
El Reiki puede ayudarte a sentirte tranquilo y relajado y puede promover la curación. Puedes utilizar el Reiki junto con otros tratamientos médicos o terapias alternativas.
Para obtener más información sobre la terapia Reiki y otras terapias integrativas, visite bannerhealth.com.